Había una vez un borracho que llega a su casa a las tres de la madrugada y toca el timbre.
¡Ábranme la puerta! ¡Ábranme la puerta!
Y no le abrieron la puerta. Entonces fue al negocio de la esquina y pidió prestado un teléfono, y dice:
Buenas noches, ¿está José Luis?
Y le responden:
No, él no está.
Y dice:
¡Cómo diablos quieren que esté si no me quieren abrir la puerta!
¿Cómo se dice dentista en chino?
TEKURO TUKARIE
Un día Juanito le dice a su tía:
¡Fea!
Entonces, el papá le dice a Juanito que él no le debe decir así a los mayores y mucho menos a su tía, anda hijo y dile a tu tía que lo sientes, y Juanito muy obediente fue donde su tía y le dijo:
Tía lamento que seas fea.
Cierto día, a mitad de una clase, un maestro de literatura se quedó profundamente dormido detrás de su escritorio. Cuando despertó, queriendo disculparse, les dijo muy serio a los alumnos:
Me remonte en sueños al tiempo de Don Quijote de la Mancha y le pedí consejo sobre los mejores libros de caballería.
Al otro día, uno de los muchachos se acomodó en su pupitre y lo venció el sueño. Al verlo, el maestro lo despertó y le pidió una explicación, a lo que el chico respondió:
Me remonté en sueños al tiempo de Don Quijote, le pregunté por usted y me dijo que no lo conocía.
En un carro iba una pareja de casados pero iban peleados, al pasar frente a una granja el novio vio unos cochinitos y le dijo a la mujer:
¿Familiares tuyos?
Y ella le contestó:
¡Sí, mis suegros!
Había en un pueblo, un padre exageradamente orgulloso de su mujer por haber tenido seis hijos, tanto que la llamaba madre de seis, esto a su esposa le molestaba muchísimo, y un día que se encontraban en una boda le grita el esposo para que todos escucharan:
¿Ya estás lista para irnos madre de seis?
Con furia su esposa contesta:
Claro que sí, padre de cuatro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario